martes, 13 de enero de 2015

Como antes.

Cuando lo más aterrador de tu pasado eres tú, y al sonar esa canción vas hacia la puerta como una esquizofrénica para reencontrarte con él. Cuando al otro lado estás tú, hace algún tiempo. Se acerca poco a poco a ti, y os quedáis mirando, a un centímetro de distancia, a los ojos. "Oh Dios mío", piensas. Te das cuenta de lo oscura que tenías la mirada, casi puedes sentir el frío que transmite. Lleva puesto el vestido más tétrico que has tenido nunca, ni si quiera recuerdas en qué momento decidiste ponértelo, pero no desentona nada con el aspecto de muerta que tiene. "¿Cuándo estuve exactamente así?". No deja de mirarte fijamente. Estira un brazo hacia a ti y no quieres que se acerque más. Tienes miedo. Estás temblando, quieres llorar y gritar.
Ahora sabes que, o empiezas a correr o te agarrará del cuello y te ahogará poquito a poco sin que te des cuenta, pero con dolor.
-Como antes- me dice.

No hay comentarios:

Publicar un comentario